Entrevista exclusiva con Pablo Villegas, lider de la Montaña Gris

Por Diego Alejandro Londoño Molina
androide_paranoico4@hotmail.com
honestidad.brutal01@gmail.com

LA MONTAÑA GRIS

Reseña grupo

La Montaña Gris, música celta y de la fantasía, nace el día 18 de agosto de 2001 en Medellín - Colombia. Desde sus inicios se ha caracterizado por la difusión del folclore del norte de Europa comúnmente conocido como música celta. Pablo Villegas, su fundador, considera la música celta como uno de los folclores que permitieron el desarrollo de la música en occidente y en América y considera que dicho folclore es un legado que desde la antigüedad, los duendes, las hadas y todos aquellos personajes que conocemos como representantes de la fantasía, dejaron para alimentar la alegría de los humanos. La música celta provoca, en sus oyentes, la sensación de lo mítico y abre las puertas de la imaginación.

En el transcurso de seis de trabajo el grupo ha desarrollado una gran cantidad de conciertos que han logrado generar una nueva propuesta musical apetecida en teatros, universidades, centros culturales, centros turísticos, parques, tablados, colegios, bares, cafés, matrimonios y fiestas, entre otros. Realizan en promedio 70 conciertos por año.

Su primer trabajo discográfico, CANTO PRIMIO, da a conocer sus mejores canciones, cantadas en inglés, español, y Lengua Primia, idioma que actualmente se habla en La Montaña Gris.

Entre octubre y diciembre de 2004 realizaron una primera gira por Suramérica que abarcó Chile, Argentina, Brasil y Ecuador, realizando gran cantidad de conciertos enmarcados en festivales y encuentros internacionales que le permitieron a La Montaña Gris tomar un posicionamiento y lograr un reconocimiento importante en el medio de la Música Celta en Latinoamérica.

Entre los meses de Septiembre y diciembre de 2006 recorrieron nuevamente América del sur realizando 30 conciertos en Ecuador, Chile, Brasil y Bolivia. Presentando su nuevo trabajo discográfico EN EL REGAZO DE LA CARAMAÑOLA. Este disco concibe la vida como un viaje, y desarrolla música dedicada a los viajes y a los viajeros en Lengua primia, inglés, italiano, francés y español. En el transcurso del viaje realizaron un video documental titulado TRAS LOS VESTIGIOS DEL FUEGO.

Actualmente cuenta con 5 integrantes que interpretan: Violín, Mandolina, Acordeón, Guitarra, Flauta Traversa, Flauta Irlandesa, Percusión tradicional,
Voz Femenina y voces y coros masculinos.

hablemos con Pablo:


¿Cómo se gestionaron las giras? Y alguna experiencia curiosa que haya ocurrido en ellas?


Las giras han sido un trabajo mío haciendo uso de Internet. Apoyado en grupos y productores que trabajan a lo largo de Suramérica. Son trabajos que requieren dos años aproximadamente para que fluyan de una forma correcta.


¿Logros y satisfacciones obtenidas en la Montaña Gris?

Creo que el mayor logro del grupo es cuando la gente sonríe con nuestra música, cuando la gente se desdobla y vuela por el interior de su alma y recupera las memorias perdidas de las antiguas generaciones. También cuando la gente llora, porque el llanto es la huella del mar en el rostro y el mar es nuestro pasado común y lo evocamos en la tristeza. Otro de los logros es tener un público constante que quiere al grupo y se preocupa por lo que suceda con él. El mayor logro para mi es acercarme cada vez mas a la música que tengo en el interior de mi alma.

¿A que gente llega o va dirigida la música de la Montaña gris?

Está dirigida a todo tipo de público, hemos hecho conciertos en guarderías, colegios en primaria y secundaria, universidades, empresas, teatros, bares y cafés de todos los estratos, pueblos, ciudades grandes, ciudades pequeñas, gente blanca, amarilla, negra e india ha disfrutado de nuestra música. Realizamos más de 70 conciertos por año.

¿Como es la acogida del grupo en otros países, según las experiencias de la gira y como es en relación con la acogida que recibe en el país?

La gente recibe el grupo muy bien, hemos recogido muchos testimonios que aparecerán en nuestro DVD en donde se muestra claramente que La Montaña Gris es un grupo que es muy bien recibido en toda América del Sur y en Europa a donde constantemente enviamos nuestros discos. Pienso que es igual la acogida acá y en otros países, la única diferencia notable es que en este país la gente es más bruta para la música que en los demás, hay analfabetismo artístico en este país, diferente a lo que se ve en países como Brasil o Chile en donde la gente sabe de música. Son educados con la música y por lo tanto la asumen desde otro lente que para uno como músico es bien interesante.

¿Crees que con la música de la montaña gris se aporta a la transformación social y cultural de la ciudad en un contexto musical?

La música genera una conciencia del universo y esto hace que el ser humano sea un poco mas real y esté relacionado más directamente con el mundo que lo rodea. La música celta, al ser una música antigua y que tiene muchas raíces inconscientes en nuestro acerbo intergeneracional, permite una transformación en tanto le devuelve al individuo un poco de su oscuro pasado, remoto pasado que fue abandonado en Europa por los guerreros que iban a la conquista de América. Esta música nos entrega imágenes que hemos perdido y que necesitamos para seguir soportando la vida.

Desde las experiencias de la Montaña Gris, ¿observan una transformación cultural musical en la ciudad en los últimos años? Como seria esta transformación y en relación con el grupo: como es el apoyo, los espacios que se le brindan y las oportunidades para dar a conocer a mas personas su música?

Creo que ha habido un cambio en la forma pero no en el contenido. La administración municipal apoya a los grupos pero se ve que en el fondo solo hay una idea de decir “ahora sí estamos apoyando” pero en el contenido que se ofrece a la gente hay aun demasiadas falencias. Faltan espacios adecuados para las presentaciones, falta que el sonido sea medianamente bueno, falta difusión y contextualización de los eventos. Falta mas apoyo a los grupos establecidos. Falta que por ejemplo al Rock no se lo asuma como una “cosa juvenil” es patético que un festival de Rock lo organice metro juventud y no directamente la secretaría de cultura. Medellín es una ciudad de sordos que creen que escuchan muy bien, y mientras esto no se transforme todo continuará igual. La gente que administra es gente que tiene poca idea de música. Pienso que la transformación cultural es un ideal pero el mundo de las ideas es bien diferente al mundo de las cosas concretas. En las ideas, en la mente, todo puede funcionar, pero en la realidad todo es jabonoso y pegajoso.

En cuanto al apoyo que se le brinda al grupo, la verdad es que el grupo se apoya a sí mismo. No quiero yo depender del estado, ellos son los que dependen de mí y eso me lo recuerdan en las cuentas que llegan cada mes. Así que yo los seguiré apoyando como a otro mas que hay que apoyar jajaja. Y si ellos quieren darme las gracias por el apoyo que les brindo pues bienvenido sea.

¿Cómo vivir de la música celta en un país tropical?

Igual que en cualquier parte del mundo vivir de la música es lo mejor que le puede pasar a todo el que le gusta hacer música. Esto es una verdad en cualquier profesión, si usted hace lo que le gusta y eso le da alegrías y dinero pues es un afortunado y siga por ese camino. En mi caso me hace feliz hacer música y logro pagarme mis gastos para seguir haciendo más música.

¿Desde la visión que tenia el grupo en sus inicios, se pensaba en llegar hasta estas proporciones de poder vivir de el?

Sí, desde que yo fundé el grupo ese ha sido siempre mi objetivo y cada vez lo estoy logrando más. Eso me tiene muy contento y es el resultado del apoyo de la gente, en últimas, lo único que hace a un grupo es tener público, si tienes público tienes un grupo, sino tienes público, no tienes nada.

¿Cómo hace un grupo o proyecto musical para convertirse en una empresa?

Pensando como empresa, es decir sabiendo que un grupo es muchísimo mas que reunirse a hacer música, a componer canciones y a pensar en acordes. Para hacer un grupo hay que tener público y ese público son clientes, gente que compra lo que haces y esto te convierte en una empresa. En una organización que busca esa retroalimentación constante. Yo le entrego emociones al público y el público me entrega emociones a mí. Y esto no puede hacerse en forma desorganizada, esto requiere una planeación, una diferenciación de funciones, unas formas y una actitud. Algo que en las escuelas y facultades de música no enseñan y que como resultado tienen músicos que no saben cómo valorar su trabajo, ni en qué es que trabajan, solo saben tocar muy bien un instrumento y ya… se sientan en su casa a renegar del mundo y a decir que en Colombia no hay oportunidades. La oportunidad está en la mente y en cómo uno asume y siente lo que hace.

Texto inspirado en “Medellín a solas contigo” de Gonzalo Arango

Por Mauricio Monsalve Builes

malaugurio@hotmail.com

Una especie de epígrafe.

Los signos están ahí, algunos son casi universales, en esa medida son fascinantes y de gran fuerza, ideales para manipular, aglutinar o vender, pero me parece apasionante la forma como otros signos, no tan universales, sugieren cosas distintas para distintas personas y más sorprendente aún, como evocan cosas diferentes e incluso contradictorias a la misma persona en diversos momentos existenciales.

No se lo atribuyo del todo a la ciudad pero a veces Medellín es deprimente, su convulsionado centro huele a orina al sol (berrinche), chunchurria y marihuana, tres cosas que dan cuenta del poco civismo de las personas que mean en la calle, de unos hábitos alimenticios que no dejan de lado ninguna de las partes del animal que sacrifica -cual carroñero- y de la compulsión irrefrenable del mariguanero promedio, que te tira el humo a la cara. La cantidad de vehículos a parte de saturar la ciudad de ruido y humo, nos muestra el ideal de la mayoría de los que logran cierto nivel económico “comprarse un carrito”, después “cambiar de carrito” y cuando las cosas van muy bien “Me voy a comprar un carrazo”… el carro da autonomía, movilidad, comodidad, también status y reconocimiento, pero ¿qué pasaría si cada uno de nosotros tuviera y realizara ese ideal de tener carro? simplemente la ciudad se volvería inhabitable, sucedería constantemente lo que ocurrió con la regional: la propuesta de sacrificar varios miles de árboles para ampliar las vías. En la medida en que nuestros conciudadanos tengan prosperidad comprarán más carros y ¿qué habrá que hacer en ese momento? ¿tumbar todos los árboles? ¿abolir los andenes? ¿Qué la mitad de los ciudadanos estudiemos y trabajemos de noche para evitar tacos, y que no nos veamos nunca con la otra mitad? ¿algo así como un muro de Berlín hecho de tiempo? Medellín a veces nos arrincona contra el absurdo. Pero eso es parte de su encanto

Medellín es hermosa, todo depende del sesgo afectivo y anímico que tengamos en el momento. Si es de alegría y contento, lo que olemos en la ciudad es libertad para orinar donde sea, sin el peligro de ir a la cárcel por ello; las fritangas son exóticas y económicas propuestas gastronómicas, que sacian el hambre del borrachito que vuelve a su casa con su mujer, después de gastarse el salario de una quincena en un sitio donde “si hay peluche”; o con el olor de la marihuana, percibes la posibilidad de cambiar tu estado de conciencia con una hierba barata que no da guayabo y que te hace sentir genial.

Respecto a los carros: Pocos placeres como ir en uno de ellos a una buena velocidad, con el mar como destino, oyendo buena música a un volumen no estridente, con una mujer con la que te guste hablar y disfrutes acostarte.

(Los carros ahí, pero no en Medellín a las horas pico que cada vez son más largas.)